lunes, 4 de noviembre de 2013

PAPA FRANCISCO: EJEMPLO DE CONVERSION

El Papa Francisco, figura verdaderamente renovadora de la iglesia, es un hombre de 76 años que nos sorprende por su cambio. Su posición es diferente y se puede comprender sólo a la luz de la acción del Espíritu Santo. ¿Quién conoció a Bergoglio así? Algunas consideraciones: 1. El Espíritu guía a la Iglesia de muchas y variadas maneras… Juan Pablo II lo hizo con su carisma, su juventud y simpatía, dando a conocer a la Iglesia con sus numerosos viajes. Benedicto XVI puntualizó y reafirmó los dones sobrenaturales con sus encíclicas sobre la Fe, la Esperanza y la Caridad. Francisco lo hace dirigiendo su mirada hacia lo esencial e importante del mensaje cristiano, sobre todo la misericordia de Dios Cada uno con sus dones y carismas va dando forma al rostro de Cristo que es la Iglesia. 2. Para lograrlo, estas personalidades de la Iglesia se han “dejado conducir” por el Espíritu que se manifiesta en las realidades concretas de la vida de las personas y de las estructuras. Para esto “hay que tener fe” y no confiar sólo y excesivamente en uno mismo. Francisco pone en evidencia ese don de la fe que es capaz de transportar montañas y cambiar lo que tiene que cambiar aunque haya resistencias. También nosotros tenemos esta oportunidad ya que no es prerrogativa del Papa o de “algunos”. El don del Espíritu Santo es para toda la Iglesia de la que somos parte insustituible. Pero para esto tenemos que crecer en la fe (“¡aumenta nuestra fe!”) y ser dóciles a la voz del Espíritu. El Papa Francisco seguramente descubrió esa voz escuchando a los cardenales antes del Cónclave que pedían un cambio de ruta en la Iglesia. Francisco va “adelante” marcando el camino; “en medio” como un hijo más de la Iglesia; “atrás” para protegernos y ayudar a los que se sienten cansados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario