SABER SER AGRADECIDOS: ACTITUD OLVIDADA

1.      SABER SER AGRADECIDOS

Hoy cuesta ser agradecidos. Parecería que todos tenemos derechos y no obligaciones. Así no puede entrar el “dar gracias”

Si hoy estamos donde estamos, con nuestras riquezas y pobrezas, se lo debemos a muchas personas que nos precedieron, tanto a nivel humano, social y religioso. Alguien trabajó para nosotros.

                                                   

2.        Nuestra vida fue y es un don por eso el agradecimiento es la base de la solidaridad.

Agradecimiento es saber agradecer y tomar conciencia que los dones recibidos conllevan el ser usados también para el crecimiento de la fraternidad.

De allí que hay que insistir más sobre los deberes que sobre los derechos ya que los deberes cuesta aprenderlos y se olvidan rápido; pero los derechos se aprenden rápidamente y nunca se olvidan.

3.      EL AGRADECIMIENTO EN EL CLIMA RELIGIOSO

A)    LA EUCARISTIA

La palabra quiere decir “dar gracias”. La Eucaristía es la fuente del agradecimiento. Como parecería que no hay motivos para agradecer no se aprecia la Eucaristía que es un decir Gracias a Aquel que nos dio la vida, el tiempo y todo cuanto existe.

Pero sobre todo el don más grande de todos los dones: Jesús, Hijo de Dios, que nos acompaña para introducirnos en su ¨Reino” inmortal.

·           También es pedir la gracias de saber usar bien los demás dones; la solidaridad.

·         Eperar estar para siempre con Dios más allá de la vida terrena

·         Es escuchar la Palabra de Dios que nos impide exaltarnos cuando todo va bien o deprimirnos cuando va nos va mal.

·         Es confrontarnos para no creernos Dios y entonces crecer a su imagen y semejanza. Evita la autosuficiencia y el vivir sin expectativas futuras.

B)    LA IGLESIA

Un tema al que estamos invitados en este nuevo año, con Mateo, a confrontarnos. Justo hoy con toda la problemática que existe. Pero es nuestra Madre.

Es un argumento discutido hoy más que nunca.

Sigue siendo un “objeto misterioso”. Decía S. Ambrosio: “La Iglesia parece estéril en este mundo, porque no genera cosas mundanas, ni cosas presentes, sino cosas futuras, es decir aquellas realizaciones que no se ven”